Hoy la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) iniciará una investigación administrativa «de carácter urgente a fin de determinar si se ha incurrido en actos o hechos irregulares» respecto a las 800 dosis de la vacuna Sinovac contra el Covid-19 que debieran ser desechadas en el hospital de Canelones porque o se respetó la cadena de frío.

La caja con las dosis llegó al hospital en la madrugada del sábado. Ingresaron por la emergencia, única puerta abierta del centro de salud a esa hora, y allí quedaron hasta el lunes siguiente, sin la refrigeración adecuada. En principio se estima que hubo fallas en la comunicación con las autoridades del hospital, y errores de la emergencia que no refrigeró las vacunas. El laboratorio Calmette, que recibe, prepara y distribuye las vacunas, repuso las dosis perdidas y las personas agendadas recibieron sus dosis según lo previsto.

El asesor logístico del Ministerio de Salud Pública para el plan de vacunación, Raúl Bianchi, dijo en radio Uruguay que las cerca de 800 vacunas Sinovac que fueron descartadas en Canelones “estuvieron un fin de semana sin que nadie las viera para ponerlas en la heladera”.