El pasado miércoles, en la sede de la Cámara de Comercio de Ciudad de la Costa, se realizó el segundo desayuno de trabajo «De Primera Mano», que busca acercar información de interés a vecinas y vecinos del departamento canario. En esta oportunidad, Alejandro Ruibal, CEO de Saceem y representante del consorcio Tres Eses —integrado por Saceem, Stadler y Stiler—, presentó ante la población canaria el proyecto del Tren-Tram, una iniciativa de transporte público que busca conectar Montevideo con Ciudad de la Costala actividad contó con la participación de más de 70 invitados, entre autoridades nacionales, departamentales, municipales, socios y empresarios de la ciudad.

Ruibal explicó que el Tren-Tram se plantea como una inversión país, destinada a ser financiada a largo plazo, y subrayó que “no va a ser una carga de golpe a la administración actual, sino algo que se puede distribuir en el tiempo”, permitiendo que el Estado recupere la inversión a través de la dinamización económica e impositiva que genere el nuevo sistema. Destacó que Uruguay tiene experiencia en captar financiamiento internacional para proyectos de esta envergadura, recordando que “levantar 500 millones de dólares no es un problema” y que el país ya ha desarrollado obras por casi 3.000 millones de dólares bajo el esquema de participación público-privada.

Respecto a las características técnicas, desde el equipo asesor explicaron que se trata de un sistema masivo de transporte que ofrece confort ferroviario, puntualidad, eficiencia, seguridad y cero emisiones, lo que contribuirá a mejorar la calidad de vida de la población y la fluidez del tránsito vehicular. “Un transporte público atractivo disminuye la movilidad privada”, afirmó, y agregó que, según una encuesta de opinión pública realizada por el consorcio, el 82% de la población manifestó su acuerdo con la solución propuesta. “Entendemos que de las soluciones que están arriba de la mesa, es la más interesante”, agregó.

El CEO de Saceem relató que la propuesta fue presentada como iniciativa privada en 2022, siguiendo los procedimientos legales correspondientes. Posteriormente, obtuvo la aprobación de Presidencia de la República y del Ministerio de Transporte y Obras Públicas, tras un proceso de pre factibilidad que incluyó reuniones e intercambios técnicos con las intendencias de Montevideo y Canelones. Actualmente, el proyecto se encuentra a la espera de nuevas definiciones políticas para avanzar hacia la etapa de licitación.

Consultado por el alcance geográfico del proyecto, Ruibal aclaró que inicialmente Atlántida no está incluida en el trazado previsto. Sin embargo, señaló que el sistema es adaptable a futuras extensiones, como ocurre en ciudades españolas donde el mismo modelo de tren-tram interconecta varias localidades.

En relación a las paradas, Ruibal detalló que se proyectan 25 estaciones distribuidas a distancias de entre 600 y 1.200 metros, una configuración diferente a la habitual en los sistemas actuales de transporte público. “Si queremos que el sistema funcione verdaderamente más rápido, algo relativamente natural es que las paradas estén más espaciadas”, argumentó.

Frente a inquietudes del público sobre la convivencia del nuevo sistema con las actuales líneas de ómnibus, Ruibal respondió que no se pretende eliminar toda la movilidad existente de forma inmediata. Admitió que «romper un paradigma tiene un periodo de transición y adaptación», y adelantó que probablemente algunas líneas de ómnibus se mantendrán, mientras que el objetivo general es captar más usuarios para el transporte público, reduciendo el uso de vehículos particulares.

También al ser interrogado sobre el tipo de energía que utilizará el tren-tram, explicó que funcionará mediante catenaria eléctrica y destacó que esta opción representa una alternativa más ecológica en comparación con el uso de baterías, cuya disposición final representa un desafío ambiental a nivel mundial. Además, opinó que sería positivo que los ómnibus transversales que complementen el sistema puedan ser eléctricos.

Finalmente, Ruibal enfatizó que el Tren-Tram no solo es un proyecto de transporte, sino una apuesta estratégica para el desarrollo urbano sostenible y la modernización del sistema de movilidad metropolitano.