La instalación de antenas de telefonía celular en la costa de Canelones viene generando resistencia y movilización en varios grupos de vecinos que se oponen a su instalación en zonas urbanas como Solymar, Salinas y Bello Horizonte. Los vecinos esgrimen razones de salud, contaminación ambiental, estética y la afectación de la morfología del paisaje.
En la Costa de Canelones los vecinos han impedido la instalación de cuatro antenas de este tipo de la empresas Antel, Movistar y Claro. Ocurrieron en Solymar en predio ubicado en las calles 66, 77 y Montevideo, en Gestido y 77, en Bello Horizonte y Salinas.
En el caso del predio de Gestido y 77 se impidió la instalación llegando a un acuerdo en la Seccional con vecinos, directivos de Movistar con la presencia de una abogada. En la instancia se acordó que retiraran los camiones que traían los primeros tramos de la antena. Ahora, según dijeron los vecinos a Metropolitano TV, se mantuvo una reunión con el Municipio, la directora general de Gestión Territorial de la comuna canaria, Natalia Brener, el presidente de la Junta Departamental de Canelones, Miguel Sanguinetti y representantes de la Unidad Reguladora de Servicios de Comunicación (Ursec). No estuvo representado en la reunión el Ministerio de Salud Pública. Los vecinos apuntaron su disponibilidad a dialogar y a profundizar en el conocimiento de este tipo de antenas y a solicitar los informes pertinentes.
Lejos del rango de emisiones nocivas
Metropolitano TV entrevistó a la directora general de Gestión Territorial de la comuna canaria, Natalia Brener, sobre cómo es el procedimiento ante la Intendencia de estas empresas a la hora de elegir un predio para sus antenas. “Para cumplir un servicio que es tener buena cobertura, es necesario por parte de las empresas poner antenas. En el departamento de Canelones hay una reglamentación en la Junta Departamental y en base a esa reglamentación es que las empresas presentan una solicitud de viabilidad para el emplazamiento de esas antenas. En esa viabilidad se analiza la distancia entre otras antenas, tiene que tener determinada distancia entre ellas, la distancia de instituciones como escuelas o clubs, la distancia en el propio predio a los límites con los vecinos. Se pueden dar en predios públicos o privados. En los públicos deben tener autorización de Municipio de la Intendencia y de la Junta Departamental”. Resaltó que los permisos son precarios y revocables ya que la tecnología avanza y tiende a bajar la altura de estas antenas que hoy superan los 40 metros.
Brener destacó que se viene cumpliendo reuniones con vecinos, técnicos, ministerio de salud publica, Ursec y autoridades de la Intendencia.
La Unidad Reguladora de Servicios de Comunicaciones (Ursec), establece un rango de emisiones posibles y Brener apuntó que las que se están colocando en la costa canaria están lejos de ese rango de emisiones.
Consultada sobre como se seleccionan los lugares para instalar este tipo de antenas, la directora general de Gestión Territorial, apuntó que en las zonas rurales no se soluciona la cobertura en centros densamente poblados. Recordó que en algunas zonas del país se colocan en edificios pero en Canelones y por ejemplo en Ciudad de la Costa, se necesitan los soportes por falta de estos edificios.
Sobre los reclamos de vecinos que apuntan a la afectación de la salud por la cercanía de esta tecnología, Natalia Brener expresó que no se trata de la cuestionada tecnología 5G y explicó qué organismos realizan los informes medioambientales y de salud