El 24 de marzo de cada año se celebra el Día Mundial de la Tuberculosis para concienciar sobre las terribles consecuencias sociales, económicas y para la salud de la tuberculosis (TB) y acelerar los esfuerzos por poner fin a la epidemia mundial de esta enfermedad.
En esta fecha se conmemora el día de 1882 en el que el Dr. Robert Koch anunció que había descubierto la bacteria que provoca la TB, lo que posibilitó diagnosticar y curar la enfermedad. En Uruguay los casos no paran de aumentar. Así en 2020 se detectaron en Uruguay 1.079 casos habiendo fallecido 110 pacientes (letalidad de 11,3). Se registraron 1.171 casos nuevos en 2023 y en 2024 fueron 1.293 casos de tuberculosis, lo que representa un aumento de 52 casos en comparación con 2023.
Desigualdad
Cristina Lustemberg, ministra de Salud Pública, dijo este lunes que, en 2024, se registraron 52 casos de tuberculosis más que en 2023, una cifra que preocupa a las autoridades. Lustemberg señaló que la enfermedad aumentó “en determinadas poblaciones etarias, como niños, niñas y adolescentes, además de personas privadas de libertad”, lo que indica una “clara desigualdad” en su extensión, registrándose, en su mayoría, en el área metropolitana y otros departamentos como Salto y Maldonado.
“Estamos preocupados”, subrayó la ministra, que adelantó que se tomarán “acciones concretas” tanto desde el ministerio como en coordinación con la Liga Antituberculosa, para favorecer, además, el diagnóstico precoz.
Esto, dijo, “no se está pudiendo hacer de forma temprana y no hace más que poner en evidencia que esta enfermedad está determinada por las limitantes sociales”, puntualizó. En ese sentido, agregó que “es una enfermedad que se contagia por vías aéreas” por lo que “las condiciones de hacinamiento la favorecen”.