Diego Olivera, secretario general de la Junta Nacional de Drogas, estimó que cerca del 50% de la marihuana que se consume hoy en el país se obtiene de manera legal. Hay 36.355 personas que anotadas en las 17 farmacias que venden marihuana en Uruguay. Son 7.163 que realizan cultivo doméstico y 3.748 personas anotadas en clubes.
La franja de edad de mayor consumo se sitúa entre los 19 y 25 años. Olivera apuntó que así ha sido históricamente, pero ahora, «creció una franja de mayores de 45 años», aunque detalla que puede tratarse de gente que ya consumía antes de la regulación, pero que ésta le generó un clima de confianza para admitirlo en una encuesta.
«Estimamos que se ha evitado que más de 25 millones de dólares fueran a parar a manos de organizaciones de narcotráfico, si tomamos en cuenta el valor de los cultivos domésticos autorizado, los clubes de membresía y los cultivos destinados a la venta en farmacias», explicó Olivera a Radio Uruguay.
Además de significar «un golpe económico al narcotráfico», Olivera recordó que la marihuana que se comercializa por las vías legales es «cualitativamente diferente» a la que circula ilegalmente. Y si buen esto no significa que no sea perniciosa para la salud, no presenta los mismos riegos que «la marihuana de mala calidad» que se vende en el mercado clandestino.
«La regulación nos permite mayores garantías para impedir el acceso por debajo de los 18 años. Eso no se logra de la noche a la mañana, pero la regulación genera mejores salvaguardadas para evitarlo», sostuvo.