El Sistema Integral de Protección a la Infancia y a la Adolescencia contra la Violencia (SIPIAV) presentó este viernes el informe 2024.

Se registraron 8.924 situaciones de violencia hacia niñas, niños y adolescentes en 2024, esta cifra representa un aumento respecto a los 8.157 del año 2023 y respecto a los 7.473 de 2022.

Del total, 2.501 situaciones fueron nuevos abordajes. El resto, continuación de los casos trabajados desde los años precedentes. Entre los albergues de Inmujeres y de INAU para mujeres víctimas de violencia y sus hijos e hijas, se atendieron 620 niños, niñas y adolescentes. Se mantiene un mayor registro de niñas y adolescentes mujeres varones: 56 % y 44 %, respectivamente.

Por segundo año consecutivo, en el tramo etario de 13 a 17 años hubo mayor cantidad de registros (38 %). En primera infancia (de cero a cinco años) el porcentaje llegó al 17 %. El tipo de violencia con mayor cantidad de registros fue maltrato emocional con un 38 %, seguido por negligencia 23 %, violencias sexuales 22 % y, por último, maltrato físico con el 17 %.

Casi 8 de cada 10 de las violencias sexuales registradas fueron de niñas y adolescentes mujeres, la mitad (51 %) en el tramo etario de 13 a 17 años. Se mantienen registros de situaciones con alta cronicidad 71 % y recurrencia 86 %. Solo en una de cada tres de situaciones registradas, niños, niñas y adolescentes logran visualizar la violencia y el daño.

Personas agresoras

En relación con las personas agresoras, el 38 % corresponde a padres y el 23 % a madres. Se destaca que se mantiene que el 90 % de las personas que violentan son familiares directos o integrantes del núcleo de convivencia, porcentaje que se mantiene sin variaciones significativas.

En violencias sexuales, tres de cada cuatro personas agresoras son familiares directos o integran el núcleo de convivencia.

Poco más de la mitad de las personas agresoras se encuentran entre los 30 y 44 años y el 55 % del total no conviven con niños, niñas o adolescentes que violentan.

En 2024 se registraron cuatro muertes infantiles por violencia vicaria.