Uruguay pasó, en tres años, de tener 1 % de generación eólica a 22 % del total de la electricidad generada, porcentaje que aumentará a 31 % en 2017. Así lo destacó este jueves en Madrid el presidente de UTE, Gonzalo Casaravilla, quien adelantó el interés de inversores extranjeros por participar de obras que el ente prevé para los próximos tres años en producción, distribución y transmisión por unos 1.000 millones de dólares.
Casaravilla participó este jueves 22 de la primera mesa redonda “Inversión Sostenible en el Sector Energía: ¿Por qué invertir en América Latina?”, organizada por el Banco de Desarrollo de América Latina en la capital española, donde participan líderes del sector de energía para debatir las ventajas, posibilidades y dificultades de invertir en el sector energético en América Latina.
En diálogo telefónico desde Madrid con la Secretaría de Comunicación Institucional, el presidente de UTE resaltó el interés de los inversores extranjeros por conocer las opciones futuras de participación.
En ese sentido, les detalló las posibilidades de negocios y de participar en futuras licitaciones para lo que resta del quinquenio.
De los 3.700 millones de dólares de inversión del ente previsto para el presente quinquenio en el sector eléctrico, quedan por asignar para su ejecución en los próximos tres años del orden de 1.000 millones de dólares de los cuales 600 millones serán inversiones estatales realizadas por UTE y 400 millones, inversiones realizadas por privados para UTE.
“Les quisimos dar una idea de cuál era el remanente de inversión en esta área ya que en eólica ya están todas las asignaciones hechas”, comentó el jerarca.
Estas inversiones futuras mencionadas por Casaravilla se distribuirán de la siguiente manera: 200 millones en generación térmica, 400 millones en transmisión y 300 millones en distribución.
UTE acaba de adjudicar la obra para la línea eléctrica de 500 kilovoltios entre Tacuarembó y Melo, que permitirá cerrar el anillo de alta tensión del norte del país, con una inversión estimada en los 90 millones de dólares que se pagará en modalidad de leasing.
En ese contexto, otros futuros llamados que requerirán nuevos inversores implicarán, por ejemplo, la ampliación de la línea de Tacuarembó a Salto; una subestación que une Puntas del Tigre con otra línea que viene desde Salto Grande y recambio de transformadores.
Generación eólica
“Uruguay se destaca por el dinamismo en la generación eléctrica: en tres años pasó de un 1 % a un 22 % de eólica”, sostuvo el presidente de UTE, Gonzalo Casaravilla en Madrid.
Durante su presentación, destacó que Uruguay logró pasar en tres años de un 1 % de producción eólica en 2013 a un 22 % previsto para el cierre de 2016, de toda la energía eléctrica generada en territorio nacional. Este valor, según apuntó, crecerá a un 31 % en el año 2017.
“Fueron tres años de caravanas de camiones en las rutas y congestiones en los puertos en el que el paisaje dominante eran aerogeneradores”, comentó a los asistentes al evento.
En particular, y a los efectos de ilustrar las inversiones realizadas, insistió en que en estos tres años se habrán instalado un total del orden de 1.300 megavatios (MW) de aerogeneradores y en 2017 se instalarán los últimos 180 MW previstos en esta primer etapa del cambio de la matriz eléctrica de generación, llegando al orden de 1500 MW instalados a fines de 2017.
En ese marco, Casaravilla identificó los aspectos que a su entender determinaron que se lograra la rápida transformación de la matriz energética en condiciones técnico-económicas adecuadas: la confianza en el país y también en la UTE; la articulación de instrumentos legales, regulatorios y comerciales claros y predecibles; las buenas condiciones de mercado (costo del dinero y madurez de la tecnología); el alineamiento de todos los actores relevantes trabajando en equipo; y el hecho de que UTE actúa como desarrollador de proyectos.
En particular, sobre este último punto, recalcó que UTE, ya sea con inversión propia, por modalidad de leasing, por asociación con Eletrobras o concurriendo al mercado de valores con fideicomisos o sociedades anónimas, ha procurado el desarrollo y será responsable de la operación y el mantenimiento del 34 % de toda la energía eólica instalada en territorio nacional, al tiempo que tiene los derechos comerciales del 94 % de toda la energía asociada para distribuir en el marco del servicio público.