Cuatro referentes en salud del Frente Amplio como el ex intendente de Canelones, médico neumólogo, ex presidente de ASSE y el Sindicato Médico, Marcos Carámbula, Ricardo Ehrlich científico, biólogo, bioquímico, ex Ministro de Educación y Cultura y ex intendente de Montevideo, el doctor y especialista en Administración de Servicios de Salud y en Sistemas y Servicios de Salud OPS, OMS y Vice Ministro de Salud Pública, Miguel Fernández Galeano y el doctor y referente en Salud, Uruguay Russi, enviaron una carta al ministro de Salud Pública, Daniel Salinas, que también derivaron a Federación Médica del Interior y al Sindicato Médico del Uruguay.
Entre varios puntos en la misiva se advierte por la situación de los trabajadores de la salud y la eliminación de iniciativas orientadas a prevenir los contagios. En cuanto a las vacunas indican que «nos consta la buena disposición» para acceder a la vacuna de Oxford AstraZeneca y se afirma que hay disposición para incluir a Uruguay en su plan. Y agregan que «ello sin descartar la posibilidad de obtener las vacunas en marco de la iniciativa Covax de la OMS».
La siguente es la carta textual:
«Con el mejor ánimo de colaborar ante un crecimiento exponencial de casos diarios de COVID-19 y el consecuente número de internaciones y fallecimientos es que nos dirigimos a usted. Existe un estado de honda preocupación en los trabajadores de la salud por las repercusiones en todos los niveles de atención, en especial, el primer nivel, la emergencia y los cuidados intensivos. Asistimos a la flexibilización de las medidas de restricción de la movilidad y la eliminación de iniciativas orientadas a prevenir los contagios, tales como la reducción del número de pasajeros en el transporte interdepartamental o la modificación de los límites de las fronteras nacionales. En el marco de un claro reconocimiento al trabajo que viene desarrollando el GACH frente a la pandemia, quienes abajo firmamos, personas públicas con diferentes responsabilidades en la gestión de la salud en los últimos años, expresamos que:
1) Tal como usted señaló en estos días, para un país chico como Uruguay, con un plan de vacunación de máxima de 2.800.000 y uno de mínima de 700.000 personas vacunadas (trabajadores de la salud, población de riesgo y adultos mayores), es muy difícil posicionarse en el mercado de un mundo tan ávido de vacunas.
2) Ante estas circunstancias, el Presidente de la República indicó que el plan de adquisición confidencial supone “colarnos entre los grandes” ante las empresas proveedoras que le dan prioridad, como es lógico, a aquellos estados que han reservado con mucha anticipación las vacunas o han sido parte de protocolos en sus fases tempranas.
3) Como alternativa a lo expuesto por el Sr. Presidente, entendemos conveniente asociarnos a estados de América Latina para lograr lo antes posible acuerdos para adquirir alguna de las vacunas aprobadas internacionalmente que han demostrado en Fase III los niveles exigibles de seguridad y efectividad. Algunos de estos países ya han comenzado la vacunación, como Argentina y México, que además comenzarán la producción para la región de la vacuna Oxford AstraZeneca, aprobada por el Reino Unido y la Unión Europea en un camino que hoy aparece seguro y confiable. A este respecto nos consta la buena disposición de estos estados y conglomerados Oxford AstraZeneca para incluir a Uruguay en su plan. Ello sin descartar la posibilidad de obtener las vacunas en marco de la iniciativa Covax de la OMS.
4) En este momento resulta clave la confianza en nuestras autoridades. Para eso es fundamental, ante la enorme preocupación de los uruguayos, tener claro el rumbo que decidirán tomar. Esto haría más factibles las asociaciones internacionales que nos permitan tener un mayor marco de certezas.
5) Uruguay tiene una muy rica experiencia desde siempre en su sistema de vacunación y no dudamos que, con la voluntad de nuestra población, la experiencia y fortaleza de los prestadores públicos y privados del SNIS y su personal de la salud, estaremos a la altura de las necesidades.
6) Hoy hace falta, más que nunca, que como ciudadanos asumamos la responsabilidad del derecho a la salud y el compromiso con la prevención empezando en nuestros grupos familiares laborales o amistades. En ese sentido no nos parece adecuado confrontar en torno a las causas del crecimiento de los contagios atribuyéndolos a organizaciones de la sociedad de diferentes orígenes comprometidas en la lucha de sus derechos.
La situación que atravesamos exige de cada uno de los ciudadanos y ciudadanas lo que esté a su alcance y de quienes tienen la enorme responsabilidad de conducir el país, la sabia voluntad de escuchar. En este sentido nos ponemos, una vez más, a su disposición con el objetivo de colaborar en la solución de un tema tan difícil y en el que está en juego ni más ni menos que la vida. Con el mismo espíritu, trasladaremos esta propuesta a la presidenta de la Federación Médica del Interior, Dra. Patricia Nava, y al presidente del Sindicato Médico del Uruguay, Dr. Gustavo Grecco, al efecto de que sean consideradas por ambas gremiales».