“Se han registrado dos casos de intento de secuestro infantil en las escuelas de La Floresta y Costa Azul, por lo que habrá vigilancia policial a la entrada y a la salida de estos centros educativos. Solicitamos a los padres estar pendientes, se trata de un vehículo Renault de color Bordó. Ante cualquier eventualidad llamar al 911”, decía la denuncia del 15 noviembre publicada en la página de facebook de Diario Arena de Atlántida.Al menos 48 horas antes, la policía tenía una denuncia radicada en la Seccional 22a de Salinas.

William Pintos de 35 años trabajaba como taxista, tenía dos antecedentes por atentado violento al pudor y vivía en Marindia. En 2004 fue su primer procesamiento pero fue internado en el Hospital Vilardebó. En esa oportunidad en bicicleta abordó y manoseó a niñas. Ante la Justicia dijo que tenía “impulsos incontrolables” y por ello fue derivado al Vilardebó donde estuvo dos años. En 2012 volvió a ser procesado pero en esta vez fue a parar al Comcar. También había atacado sexualmente a niñas en la calle. Salió en libertad en marzo de 2016.

«La Fiscalía tiene la certeza responsable de estar frente al autor del delito por múltiples elementos que obran en su poder y va a perseguir una condena abultada en el juicio», dijo el fiscal Juan Gómez. El Juez Ricardo Míguez aceptó el plazo de prisión preventiva de 6 meses solicitada por el fiscal.

Lo último en su facebook

“Ojala estuvieras aquí conmigo, o yo allá, contigo”, publicó el acusado de asesinar a Brissa el lunes a las 23:15 horas. El mismo día de la desaparición de la niña y también muy probablemente de su asesinato.

También publicó una frase de Albert Einstein; “Si quieres entender a una persona, no escuches sus palabras, observa su comportamiento”.

Durante la audiencia se mostró frío. Negó todo siempre y cuando le mostraron la imagen de su auto en la cámara dijo que no se veía la matricula.

Vecinos de Marindia dijeron que no tenían relación prácticamente con él, indicaron que ni saludaba, que era solitario y callado.

Posible condena de 30 años

La prisión preventiva solicitada por el fiscal Gómez es a los efectos de lograr una condena abultada en el juicio oral, según dijo el fiscal.

Gómez precisó que ese plazo es a los efectos de recolectar toda la evidencia posible para lograr una condena abultada en el juicio oral.

Las pruebas en las que se basa el fiscal y que fueron expuestas en la audiencia son cámaras de seguridad tanto pública como privada que ubican al automóvil del imputado en el lugar y testigos que dicen haberlo visto en la zona en la que apareció el cuerpo de la niña, entre otras evidencias.

Resta aún el resultado de la pericia con respecto a una mancha que podría ser de sangre y un pelo que apareció en el vehículo. «Tenemos un caso muy sólido pero en este tiempo queremos seguir juntando toda la evidencia posible», concluyó.

Gómez señaló en la audencia que se está en busca de la mochila y otras pertenencias que tenía la niña al momento de desaparecer.

El asesino de Brissa González podría tener hasta 30 años de prisión