Lucía Dibarboure es una estudiante de 5to. Biológico de Shangrilá que viene desarrollando desde los 10 años una carrera en artes marciales a través del Taekwondo con la que ha ganado 90 medallas en siete años. Lucía, de 17 años, cuenta entre su impecable lista de logros haber sido campeona Nacional en 2015, 2016 y 2017. También resultó campeona en Fórmula y Armas y vice campeona en Combat Weappons, dentro de su categoría. En Lima, Perú salió campeona Panamericana de sparring, en el torneo que finalizó el pasado 8 de octubre. Fue elegida por tres años consecutivos por ATA para formar parte de la Selección Uruguaya de Taekwondo, además ha clasificado los tres últimos años al Mundial de Taekwondo del que no ha podido participar por temas económicos, como por ejemplo al que se llevó a cabo en Arkansas, U.S.A, al cual no pudo ir por los altos costos de viaje, estadía, etc. Más allá de que el Municipio de Ciudad de la Costa ha colaborado con ella desde 2015.

Ahora la espera el Panamericano 2018 en Chaco, Argentina. Revista Metropolitano dialogó con su entrenador, profesor y Presidente de ATA, el master Alexis Cabrera, sobre esta falta de apoyo para llegar a un mundial al que ya se ha clasificado, sobre la prometedora carrera de Lucía y la función social y de valores que trasmite el Taekwondo, arte marcial que practican más de 2.000 uruguayos afiliados a ATA.

“Lucia es una de nuestras alumnas que está logrando buenos resultados deportivos. Nosotros tenemos un programa de competición. Lucía viene haciendo un buen trabajo y está clasificada para el mundial. Tiene grandes condiciones naturales y una fisonomía ideal para esto como el torso corto y piernas y brazos largos. Eso para la parte competitiva son elementos que marcan una diferencia. Por ejemplo si voy a jugar al basquetbol y mido 2.20 metros es mejor a que mida 1.60”, explicó Cabrera.

El entrenador destacó el cuidado y equilibrio que se debe mantener en este nivel entre entrenamiento, descanso y alimentación.

En cuanto a la frustración de no poder estar presente en el Mundial por falta de recursos económicos, Cabrera apuntó que “Lucía como otros varios competidores tienen resultados a nivel nacional no pueden a veces a nivel internacional por costos. Nosotros al ser privados no tenemos un reconocimiento por parte del gobierno. A veces apelamos a sponsors privados, a veces algún centro comunal. Tenemos casos de gente que después de grandes esfuerzos personales luego aparece el apoyo”, contó Cabrera.

El profesor se refirió al caso de Gastón Reino, “las primeras veces fue un esfuerzo familiar privado, ahora es una estrella y tiene todo el apoyo. El ideal sería que tuvieran apoyo, hay algunos indicios de querer cambiar pero todavía falta muchísimo para políticas reales que apoyen el deporte”, afirmó.

Valores marciales

Cabrera explicó que hoy en día las artes marciales son una gran herramienta para enseñar y transmitir valores. “Tenemos diferentes programas para niños, uno de 4 a 6 años donde se fortalecen las capacidades motoras y la atención, y otro basado en valores como el respeto, la autoestima, la honestidad, la comunicación. Se aplica también en el colegio y en su vida cotidiana, en la sociedad. En noviembre y diciembre trabajaremos sobre la honestidad”, contó.

El master indicó que hay diferentes estilos de Taekwondo “nosotros tenemos unos 2.000 practicantes, en 28 academias en todo el país. Nuestro estilo es Songahm Taekwondo, la casa central está en EEUU, no solo es un estilo de Taekwondo, hay también defensa personal acondicionamiento físico, y complementos como manejo de armas”, apuntó.

El Taekwondo es de origen coreano pero también hay muchas similitudes con el karate por ejemplo. En este sentido cabe recordar que Japón invadió Corea durante muchos años, entonces se obligó a los coreanos a practicar Karate, lo que dejó su secuela.