Este martes 6 de setiembre se lanza la agenda de festejos de los 100 años del Parque Franklin Delano Roosevelt, también Parque de los derechos de los niños y niñas. Según indico la directora del parque, Silvia Camejo en diálogo con Revista Metropolitano, las actividades serán de lo más variadas y llegarán hasta 2017.
“Tenemos una amplia agenda que va dese jornadas donde se plantarán árboles, ya que hace 100 años se plantó el primero, pasando por actividades académicas, deportivas y culturales. Este años serán 10 actividades hasta diciembre y en 2017 hay ocho más, porque en diciembre fue la apertura del parque por eso llega al año que viene”, explicó Camejo. Estas actividades conmemorativas, que han sido declaradas de interés ministerial por el Ministerio de Turismo y el Ministerio de Educación y Cultura. Desde 2008 la Intendencia de Canelones comienza un proceso de transformación, desarrollando el Parque de los Derechos de los Niños y Niñas, un lugar donde a través de diversas iniciativas, nuestra infancia pueda jugar, aprender, hacer deporte y divertirse, ejerciendo sus derechos y respetando la naturaleza.
Roosevelt es el primer parque estatal creado en Uruguay, en Ciudad de la Costa. Es atravesado por las principales vías de acceso este a la capital: Avenida Giannattasio, Avenida de las Américas y Avenida Wilson Ferreira Aldunate. Además de su cercanía con el Aeropuerto de Carrasco. Se le conocía como Parque Nacional de Carrasco y Parque Nacional Centenario hasta que fue rebautizado en homenaje al presidente estadounidense Franklin D. Roosevelt.

Luego de recibir la donación del predio de 350 hectáreas, el Estado encargó al Ingeniero francés Charles Racine, el diseño y la realización de un gran parque público.
Así, el 6 de setiembre de 1916, se plantaba el primer árbol, comenzando el enorme trabajo de transformación de un territorio compuesto por esteros, bañados plagados de mosquitos y médanos de arenas móviles, en el Parque Nacional de Carrasco.
La obra llevaría casi 20 años, implicando la creación de kilómetros de zanjas y canales para la desecación y salida de las aguas, como la plantación de árboles que se adaptaran a las duras condiciones de los arenales. La tarea fue llevada adelante por Charles Racine y un pequeño grupo de peones, con gran esfuerzo y muy pocos recursos económicos.
Un Eucalyptus Botryoides fue el primer árbol, al que se sumaron más de 500 mil ecualiptus de 24 clases diferentes, 700 mil pinos, bosques de acacias, robles y ceibos y 2 mil palmeras, totalizando unos 2 millones de árboles.
En 1945 el Parque sería denominado Franklin D. Roosevelt, en homenaje al ex Presidente de los Estados Unidos.