El Instituto Nacional de Estadística (INE) presentó este miércoles la primera edición del Índice de Pobreza Multidimensional (IPM), un nuevo indicador que evalúa “algunas características de carencias o privaciones duras” que no son estrictamente monetarias. Los resultados indican que un 18,9% de los uruguayos eran pobres en 2024, según el método multidimensional.

Este nuevo índice no sustituye a la medición de pobreza monetaria que el organismo realiza, explicó su director, Diego Aboal. El índice se compone de 15 indicadores y, según resaltó Aboal, aquellas personas que están bajo la línea de pobreza multidimensional tienen, en promedio, cinco carencias de esas 15.

Indicadores

Los 15 indicadores (englobados en cinco dimensiones clave —educación, condiciones habitacionales, servicios básicos, protección social y empleo—) son: vinculación educativa, rezago, años de escolarización, hacinamiento, tenencia insegura, materialidad y problemas de vivienda, acceso a internet, calefacción, saneamiento, pensiones, inactividad laboral por trabajo doméstico y cuidados, seguridad social de menores, desempleo y desaliento, subempleo e informalidad.

Las tres carencias que son más importantes y que están presentes en la mayoría de estos hogares tiene que ver con los años de escolarización, que muchos de estos hogares pobres tienen al menos un miembro que trabaja en situación de informalidad y la materialidad de la vivienda y las condiciones que tiene”, detalló el director del INE.

Asimismo, destacó que este indicador “mueve el foco de la discusión puramente monetaria”, en la que se suele poner el foco en los ministerios de Desarrollo Social y de Economía y Finanzas. De esta manera, se pasa a una “mirada global”, para incluir a organismos como la Administración Nacional de Educación Pública, el Ministerio de Vivienda, OSE o Antel.

“O sea que esto va a permitir que nos enfoquemos en mirar la globalidad del fenómeno de la pobreza y donde no solo un organismo tiene que jugar este partido”, sintetizó.